PwC acaba de publicar su ranking anual de las cien primeras empresas por capitalización bursátil en el mundo. En la comparación con el año pasado no hay apenas novedades. Apple retiene la primera posición, y le siguen Alphabet (la matriz de Google), Microsoft y Amazon, también igual que en 2017. En términos geográficos y sectoriales, las diferencias respecto al ejercicio anterior son asimismo pequeñas.

Estados Unidos continúa siendo el principal polo magnético de las grandes empresas y las compañías tecnológicas y financieras siguen mandando en la clasificación, con una capitalización conjunta entre ambos sectores que representa casi el 50% del total del ranking.

Pero si ampliamos el foco temporal, sí que encontramos jugosas novedades. Un ángulo del informe especialmente interesante es la comparación que se hace en el mismo entre 2018 y 2009, es decir, entre el comienzo de la crisis económica y financiera y la actualidad. En esos nueve años de crisis y poscrisis, el panorama de los gigantes empresariales mundiales ha cambiado de forma muy significativa.

Si nos fijamos en las primeras posiciones del ránking, podemos observar que el vuelco de nombres ha sido espectacular. En 2009, el líder por valoración en bolsa era Exxon Mobile (que en 2018 ocupa la duodécima posición), seguida de Petrochina (ahora vigésimosexta), Wal Mart (décimosexta), ICBC (undécima) y China Mobile (que ha caído nada menos que hasta el puesto número 39). Al contrario, los que aparecen ahora en las primeras posiciones estaban hace nueve años en posiciones mucho más modestas: Apple estaba en el puesto 33, Google en el 22, Microsoft en el 6 y Amazon y Tencent ni siquiera aparecían entre las cien mayores del mundo.

También hay cambios de gran calibre cuando se comparan las dos fechas por sectores. Como se puede deducir fácilmente de los nombres de las empresas que encabezan la lista de capitalización bursátil, el sector tecnológico ha arrasado en los últimos nueve años. En ese periodo, su capitalización ha aumentado un 433%, frente al 138% de media. Las empresas de bienes de consumo también han ido como un tiro, al crecer un 399%, en buena parte por el empuje de Amazon. El sector financiero, que al estar en el origen de la crisis cabría esperar que hubiera tenido secuelas negativas, parece muy bien recuperado y se ha anotado una subida de su valor bursátil del 222%. En el extremo negativo, las que más han sufrido entre 2009 y 2019 son las compañías de petróleo y gas (un pobre 14% de aumento) y las de telecomunicaciones (un 48%).

Otro análisis interesante que se desprende del estudio es el de la comparación por países. Aquí manda como siempre Estados Unidos, pero su hegemonía se ha acentuado en los últimos nueve años. Allí tienen su sede 54 de las 100 empresas del ranking, frente a las 42 de 2009, y su valor bursátil se ha elevado un 236% desde entonces. El segundo país en liza, que es China, está ahora más lejos, tanto en número de empresas que entran en la lista como de capitalización. ¿Quiere decir esto que la tendencia hacia el desplazamiento del poder económico hacia China se ha invertido o ralentizado entre 2009 y 2018? Quizás eso sea ir demasiado lejos, pero lo que es evidente es que la etapa de la crisis y la poscrisis les ha sentado muy bien en general a las grandes corporaciones estadounidenses.

¿Y España? La cosa no ha ido mal del todo. El informe incluye en la lista a dos empresas (Santander e Inditex), el mismo número que en 2009. Santander está en el puesto 82, 17 por debajo de 2009, y su capitalización ha crecido un 87,5% desde entonces. Inditex, por su parte, entra por los pelos (ocupa la posición 98), si bien su revalorización bursátil ha sido muy positiva (un 304%).