El espíritu empresarial de las personas que han acumulado las mayores fortunas del mundo ha alumbrado innovaciones tan importantes como la máquina a vapor, el motor de combustión, o Internet. En las últimas décadas, un puñado de emprendedores, provenientes en su mayoría de Estados Unidos, ha cambiado el mundo y ha dado un nuevo rumbo a la Historia. Estos multimillonarios han impulsado cerca del 80% de las innovaciones más importantes; casi un 70% de estas tienen que ver con la tecnología y el 80% de las empresas que las han desarrollado están en Estados Unidos.
Cada año, UBS y PwC resumen en un informe la evolución del colectivo de los más ricos de entre los ricos: 2.158 individuos (y sumando), cuya fortuna alcanzó, en 2017, su punto más alto en la historia: 8,9 billones. Esto supone 1,3 billones más que el año anterior (+19%), lo que es también el mayor crecimiento en términos absolutos registrado nunca. El poder de marcar y modelar la historia es una de las ocho cuestiones recogidas en el documento de este año. Veamos las otras siete:
El fenómeno chino. Hace doce años, el país con más habitantes del mundo solo era cuna de dieciséis multimillonarios. Hoy, y a medida que ‘el siglo de China’ avanza, ya son trescientos setenta y tres, cerca de un cuarto del total. Los millonarios de China están liderando la transformación económica de su país y, por extensión, la de todo Asia. En poco más de diez años, estos empresarios han creado algunas de las compañías más grandes del mundo, elevado los estándares de vida del país y amasado riqueza a un ritmo sin precedentes. 2017 fue un año excepcional, en el que el gigante asiático aportó dos nuevos multimillonarios a la semana y Asia en su conjunto, más de tres. Tal ha sido su avance, que ya hay más súper-ricos asiáticos que estadounidenses, y si continúan progresando a ese ritmo, los multimillonarios asiáticos serán también los más ricos.
A la vanguardia de la Cuarta Revolución Industrial. Ciento noventa y nueve personas se convirtieron en multimillonarios en 2017. Muchos de estos abren el camino de la Cuarta Revolución Industrial, y están difuminando los límites entre el mundo material, el digital y el biológico. Según estima el informe, cerca de un tercio de los nuevos millonarios ‘hechos a sí mismos’ hicieron su fortuna a través de la innovación y de la disrupción de los modelos de negocio.
En este proceso, están transformando la economía mundial, creando nuevos trabajos e impulsando el progreso para millones de personas en todo el mundo.
Shenzhen reta a Silicon Valley. Con las tensiones crecientes sobre el comercio y la propiedad intelectual como telón de fondo, una nueva cohorte de empresarios chinos está retando a Silicon Valley. Estos están creando nuevos modelos de negocio, aprovechando las oportunidades que se les presentan y navegando entre distintos sectores. Ochenta y nueve multimillonarios entraron en este club en 2017, tres veces más que los treinta de Estados Unidos. China produjo cincuenta start-ups unicornio entre 2016 y 2018, muy cerca de las sesenta y dos de Estados Unidos. Aupados por el crecimiento de su país, los empresarios chinos están probando ser innovadores incansables y auténticos disruptores.
De empresas familiares a familias de empresas. La empresa familiar sigue siendo una cantera de emprendedores; el 62% de los multimillonarios que heredan una, comienzan un negocio por su cuenta. En comparación, solo el 42% de los que heredan activos lo hacen. Estos datos reflejan que conservar el negocio familiar original mantiene el aliento emprendedor familiar vivo durante generaciones.
Inversores sostenibles. La inversión sostenible se está convirtiendo en una opción por la que optan cada vez más familias, a medida que los millenials asumen puestos de importancia en Family offices y organizaciones filantrópicas. Y esta tendencia tiene visos de ir a más. Más de un tercio de las Family offices -38%- tienen iniciativas en el campo de las inversiones responsables, y cerca de la mitad planean incrementarlas en los próximos doce años.
Sucesiones del siglo XXI. Durante las dos próximas décadas, esperamos una transición de riqueza por valor de 3,4 billones-casi el 40% de la riqueza total de este colectivo. Los nuevos planes de sucesión deberían reflejar el altruismo y la responsabilidad propias de los millenials, con iniciativas de colaboración entre generaciones, proyectos joint-family, y un espíritu de impulso al emprendimiento y sostenibilidad.
Los jóvenes empresarios chinos pisan fuerte, pero hay amenazas. Los jóvenes chinos están llamados a tomar el ranking de las mayores fortunas del mundo en los próximos años. Sustentados por la rápida urbanización y el crecimiento en la productividad de sus países están utilizando la tecnología para revolucionar el sector servicios de su país. Sin embargo, su camino no está exento de riesgos, como las fluctuaciones en los ciclos económicos, la liquidez financiera, o la posibilidad de que la guerra comercial entre Estados Unidos y China escale.