La IA generativa es considerada como una de las tecnologías más importantes de nuestro tiempo, y los próximos diez años estarán marcados por los avances y desarrollos que se consigan. Su impacto potencial es relevante: podría acelerar el crecimiento anual del PIB de Europa entre un 0,4% y un 0,7% de aquí a 2030, lo que supone un incremento sustancial en comparación con la tasa de crecimiento prevista de alrededor del 1,4%, sin tener en cuenta los efectos de la IA. Esta tecnología tiene la capacidad de acometer la actual escasez de profesionales cualificados en Europa y proporcionar a las empresas ventajas competitivas tanto a corto como a largo plazo.
El informe ‘How Europe can embrace the GenAI opportunity‘, elaborado por Strategy&, la consultora estratégica de PwC, analiza el impacto de la IA generativa en las empresas y en las economías de Europa en los próximos años, incluyendo los sectores y países se podrían ver más afectados.
La IA generativa supone un avance significativo en términos de variedad de aplicaciones, flexibilidad y facilidad de uso. Es capaz de responder a consultas de personas no expertas, generando resultados que incorporan elementos visuales, audio y texto en múltiples idiomas. Este sistema de inteligencia automatizada es más sofisticado que cualquier otra aplicación anterior de inteligencia y aprendizaje automatizados, pero más sencillo en términos de usabilidad.
Su potencial por sectores
Los beneficios potenciales de la IA generativa se distribuyen de forma desigual entre los distintos sectores. Por lo tanto, la implantación de la tecnología tenderá a aumentar el valor añadido diferencial entre todos ellos. Las empresas pueden maximizar las ventajas de la IA generativa mediante un cuidado análisis de los casos de uso interno, con el objetivo de aumentar la productividad en el mundo real. En este sentido, nuestro informe clasifica el potencial de la tecnología para los distintos sectores puede en tres categorías:
- Aceleradores de alto impacto. Se refiere a las empresas que tienen potencial para acelerar el desarrollo de la familia de tecnologías GenAI y lograr un rápido impacto tanto de sus ingresos como de sus beneficios. Estamos hablando de compañías de sectores como los de tecnología y software, entretenimiento y medios, farmacéutico y ciencias de la salud, servicios financieros, servicios profesionales y telecomunicaciones.
- Aspirantes. Las compañías de estas industrias pueden captar nuevas eficiencias de aplicaciones de la GenAI desarrolladas en gran medida fuera de su propio ámbito, con impacto en la cuenta de resultados. Nos referimos al sector de distribución, consumo y alimentación, de transporte de pasajeros, turismo y salud e inmobiliario.
- Bajo potencial. El trabajo físico domina la cadena de valor de las compañías. La automatización que, impulsa en parte la IA generativa, puede contribuir notablemente a mejorar su productividad, aunque en menor medida que en los casos anteriores. Nos referimos a la industria química, al sector público, a la agricultura y a la construcción, entre otros.
Análisis por país
Si realizamos un análisis por país, vemos algo evidente: aquellos que dependen en gran medida de sectores como los de tecnología, entretenimiento, ciencias de la salud, los servicios financieros y los profesionales y las tecnologías de la información serán los que experimenten un aumento más significativo de la productividad y de los ingresos. Mientras tanto, los países donde predominan sectores como la agricultura, los servicios públicos, la construcción, industria manufacturera y los servicios de soporte también se beneficiarán de la adopción de la IA, aunque su impacto puede no ser tan transformador.
El potencial de la IA generativa en el PIB de Europa
Como hemos comentado al principio de este artículo, el estudio indica que la implantación de la IA Generativa en los países europeos podría aumentar el crecimiento del PIB entre un 0,4% y un 0,7% de aquí a 2030. Esto podría suponer un billón de dólares más del PIB en 2030, un enorme impulso en una época de crecimiento económico históricamente bajo. A la hora de determinar los efectos de la IA generativa, hemos elaborado dos escenarios de aplicación, además de un escenario base “sin cambios”:
- Escenario 1. En el mejor de los casos, Europa verá cómo las empresas que forman parte de los sectores de alto impacto tendrán un peso cada vez mayor en su economía, aglutinando, en 2030, entre el 80% y el 90% de las ganancias potenciales de productividad impulsadas por la IAI. Impacto total: un crecimiento adicional del PIB del 0,7%,
- Escenario 2. En esta proyección moderada, Europa tiene un éxito limitado a la hora de atraer o desarrollar a empresas de los sectores de alto impacto, y estas compañías coparán entre 40% al 50% de las mejores de productividad previstas para 2030. Impacto total: un crecimiento adicional del PIB del 0,4%.
Diez factores de éxito para una transición a la IA generativa
Para obtener el máximo beneficio de la década de la IA generativa, es necesario que las empresas y los gobiernos europeos revisen y amplíen sus estrategias y sus planteamientos en las siguientes dimensiones clave:
- Demostrar que se apuesta por ello: los ejecutivos de las empresas deben situar la IA generativa en lo más alto de la agenda estratégica y comprometerse a realizar las inversiones necesarias, incluso aunque el beneficio efectivo de la tecnología emergente pueda ser difícil de evaluar por adelantado y los resultados finales sólo sean evidentes en una fase posterior.
- Aprovechar el ecosistema GenAI: los partnerships con los gigantes globales de IA o con las start-ups especializadas, podrían ayudar a las empresas a acelerar la implementación y permitirles recoger los frutos de sus inversiones desde el principio. Especial atención merece el análisis de alianzas con start-ups dadas las fuertes inversiones con las que tienen que competir por parte de los grandes fabricantes.
- Evaluar desde el principio el impacto de cada proyecto de IA en la cuenta de resultados: se aconseja a las empresas que evalúen el impacto de la IA generativa en su modelo de negocio y canalicen los fondos hacia las áreas en las que la tecnología promete un mayor impacto en la cuenta de resultados.
- El compromiso público y los vehículos de inversión específicos son clave: se anima a los gobiernos a unirse con los principales actores de los servicios financieros para lanzar soluciones de inversión dedicadas a la ‘transformación de IA’ que permitan a los inversores institucionales y a los individuos de alto poder adquisitivo invertir en la oportunidad de la IA Generativa.
- Invertir fondos sin caer en la trampa de las subvenciones: los gobiernos deberían destinar fondos a aumentar el atractivo de las localizaciones y empezar a crear ecosistemas GenAI integrales
- Crear un entorno digital de vanguardia a escala nacional: construir ecosistemas para crear “campeones” nacionales de IA generativa y atraer aceleradores extranjeros de alto impacto no solo depende de capital suficiente e inversiones directas, sino también del acceso a una potencia informática de alto rendimiento y a capacidades de almacenamiento en la nube.
- Incluir y empoderar a la población: para construir una economía basada en la IA generativa sostenible y ampliamente aceptada, los gobiernos deben garantizar la participación de los ciudadanos.
- Encontrar un equilibrio regulatorio entre la apertura tecnológica y la mitigación de riesgos: la implementación de la recientemente adoptada Ley de IA de la UE tendrá un gran impacto en cómo la IA generativa puede crear beneficios para la sociedad y proporcionar el impulso económico esperado.
- Garantizar una regulación adaptada a las necesidades de cada sector: Las normas deben definirse conjuntamente con los representantes del sector. Estas deberán responder a las necesidades de la industria y a su susceptibilidad a los riesgos.
- Impulsar un mercado internacional equilibrado y en igualdad de condiciones. La Ley de Inteligencia Artificial de la UE debería alinearse con países afines como EE.UU. o Japón para garantizar la igualdad de condiciones y desarrollar una coalición tecnológica internacional que busque una competencia sana y que defienda valores comunes.