El cambio climático representa una amenaza creciente para la capacidad mundial de producir materias primas esenciales. Incluso en el mejor de los escenarios, en el que las emisiones de gases de efecto invernadero disminuyen rápidamente, el cambio climático va a traducirse en  condiciones meteorológicas extremas cada vez más frecuentes e intensas. Unas circunstancias que afectará a las minas y a las granjas y a las materias primas que suministran.

En PwC hemos analizado cómo los riesgos derivados del cambio climático pueden interrumpir el suministro de materias primas esenciales en la Unión Europea, una de las principales áreas económicas del mundo y que aglutina el 14% del PIB global.

El estudio ‘Climate risk to EU commodity supplies‘, hace este ejercicio partiendo del análisis de nueve productos clave para su economía.

  • Tres minerales críticos: cobalto, cobre y litio, esenciales para la electrónica, tecnología, sistemas energéticos y para la transición hacia una economía baja en carbono
  • Tres metales vitales: hierro, aluminio y zinc, que se utilizan ampliamente en la fabricación, el transporte, las infraestructuras, la construcción, los productos de consumo y más.
  • Tres cultivos alimentarios: maíz, arroz y trigo, que en conjunto representan el 42% de las calorías que consumen las personas

Además, rastreamos el recorrido de cada materia prima desde sus puntos de origen en yacimientos y cultivos de todo el mundo, y su nivel de exposición a dos impactos climáticos como son el estrés térmico y la sequía. Unos riesgos que se clasifican como significativos, altos o extremos, en función de su potencial para afectar la producción y la seguridad de los trabajadores. Y, por último, aplicamos dos escenarios definidos por el Panel de Cambio Climático de las Naciones Unidas:

  • Un escenario de bajas emisiones, en el que las iniciativas para combatirlas consiguen mantener el aumento de la temperatura media del planeta por debajo de los de 2ºC.
  • Un escenario de altas emisiones, que se traduce en un aumento de la temperatura global del planeta de 4,4º C en 2100.
Gráfico de materias primas en riesgo en la UE

Principales conclusiones

El suministro de las nueve materias primas enfrenta riesgos climáticos significativos, incluso en un escenario optimista de bajas emisiones, debido al estrés térmico y a la sequía en los próximos años. Al menos la mitad de los suministros de trigo, maíz, litio y cobalto de la UE estarán expuestos a un riesgo significativo de sequía en 2050, en un escenario de bajas emisiones.

Si bien gran parte de los cultivos alimentarios en riesgo de la UE se encuentran dentro de la región, la mayoría de los minerales críticos y metales vitales en riesgo son importados.

La gran mayoría del litio y la bauxita en riesgo de la UE llega en forma procesada. Esto significa que la exposición completa al riesgo climático de estas materias primas en sus puntos de origen puede estar oculta para los consumidores de materias primas.

Condicionantes

No podemos asumir que las futuras reducciones de emisiones nos protegerán de un clima cambiante. Incluso en un escenario optimista de bajas emisiones, todos los productos básicos experimentarán niveles crecientes de riesgo debido al estrés térmico y la sequía prevista hasta 2050, lo que resalta la importancia de adaptarse al cambio climático mientras trabajamos para reducir las emisiones de carbono.

En algunos casos, los riesgos están aumentando drásticamente desde niveles bajos, lo que subraya la necesidad de que los productores y usuarios de productos básicos se preparen para gestionar los riesgos crecientes: en algunos casos pueden no tener experiencia previa en su manejo.

Los riesgos climáticos para los productos básicos esenciales también crean riesgos para la transición global hacia cero emisiones netas, especialmente en el caso del litio, el cobalto y el cobre, fundamentales para las tecnologías de energía renovable, como las baterías para vehículos eléctricos y el almacenamiento de energía solar y eólica.

La mayoría de los suministros de litio y bauxita de la UE tienen riesgos ocultos. Estos productos llegan a la UE en forma procesada, lo que complica la identificación de sus lugares de origen y la evaluación de la exposición de estos lugares a impactos climáticos.

Estrategias

Los líderes empresariales y los reguladores pueden necesitar emplear estrategias diferentes para gestionar los riesgos de los minerales críticos y metales vitales (que con frecuencia son importados) frente a los cultivos alimentarios que se producen a nivel nacional.

Es crucial que los productores y consumidores de materias primas se preparen para los riesgos crecientes. Para adaptarse al cambio climático, se recomienda aumentar la resiliencia gestionando los riesgos climáticos en toda la cadena de suministro, aprovechar las oportunidades de ofrecer productos y servicios que ayuden a la adaptación, y colaborar con gobiernos y comunidades para mejorar la adaptación a nivel político y sistémico.

Asunciones y limitaciones

El estudio ‘Climate risk to EU commodity supplies‘ desgrana los riesgos para la UE en su conjunto, reconociendo que las variaciones serán significativas entre los países miembros debido a la diversidad geográfica, climática y económica. Se asume que los niveles de producción y las cadenas de suministro permanecen constantes, utilizando los datos actuales de producción para estimar cómo la UE podría estar expuesta a riesgos climáticos futuros. Sin embargo, el análisis sólo revela las exposiciones al riesgo y no las interrupciones reales en el suministro.