Los nuevos negocios energéticos
Contacto: Carlos Fernández Landa -
Los últimos años no han sido nada fáciles para el sector de petróleo y gas, que se ha visto muy afectado por la volatilidad, la débil demanda y la bajada de los precios. Es verdad que en el corto plazo hay razones para la confianza. Se espera que el reciente impulso de los precios del crudo –fruto del mayor equilibrio entre la oferta y la demanda, en parte acelerado por la decisión de la OPEP de limitar la producción de petróleo-, siga su curso. También el crecimiento de la actividad del sector en fusiones y adquisiciones es señal de que las cosas marchan. Los precios del Brent subieron casi un 90% en 2016, hasta por encima de los 50 euros/barril, niveles que han seguido creciendo hasta situarse claramente por encima de los 60 euros/barril.