Envío gratis, negocio en riesgo
El comercio electrónico nos permite comprar la camiseta más molona de la Costa Oeste de Estados Unidos, pedir ese libro en alemán que no hay manera de encontrar en España o tener en la puerta de casa en cuestión de horas el marisco gallego más fresco. Para los adictos a las compras, Internet es el paraíso terrenal. Para las empresas de retail, es también una oportunidad única de llegar a consumidores y mercados que ni en sueños hubieran podido alcanzar en la era analógica. ¿Todo perfecto, pues?