La ventaja de la incertidumbre
Con la crisis económica en su máximo apogeo, Hyundai Motor Company y el resto de compañías automovilísticas experimentaron una fuerte caída de sus ventas. Los consumidores, con miedo a perder sus empleos y preocupados por la reducción del valor de sus casas, no estaban como para plantearse comprar un coche que tardarían años en pagar. Ante esta situación, la mayoría de las empresas automovilísticas optaron por una estrategia defensiva: reducir la producción y frenar sus planes de crecimiento. Hyundai, sin embargo, tuvo una idea distinta.