La agricultura también puede ser un buen negocio emergente
La agricultura siempre ha sido clave para el desarrollo económico de cualquier país. Y aunque en la mayoría de las economías desarrolladas no supone un porcentaje significativo del PIB, en muchos países emergentes, como Indonesia, India, Pakistán, Bangladesh, Nigeria, Tailandia y Egipto, todavía supone más del 10% de su valor añadido bruto -indicador que se utiliza para medir en una economía al valor que se agrega a los bienes y servicios en las distintas etapas del proceso productivo-. Su importancia desde el punto de vista socioeconómico es, además, evidente: más del 90% de la mano de obra del sector agrícola en el mundo vive en países en desarrollo.